La presidenta Cristina Kirchner no logró, durante su visita a China, destrabar el principal conflicto comercial con ese país por las restricciones a las exportaciones de aceite de soja, aunque destacó obras de electrificación en el ex ferrocarril Roca y el inicio de una nueva relación con el gigante asiático gracias a ventas de productos con mayor valor agregado argentino. La jefa de Estado firmó allí acuerdos por 10.000 millones de dólares en diversos acuerdos comerciales, 9.500 millones para financiar obras en trenes, en la que se encuentra la electrificación de la línea Roca desde Berazategui hasta La Plata, o subtes, y los 500 millones restantes para la fabricación de la vacuna contra la gripe "A".
El proyecto de un tren eléctrico será parcial, ya que arranca desde Berazategui y no de Plaza Constitución, como en el 2005 había anunciado el ex presidente Kirchner. De acuerdo con la información difundida por la secretaría de Transporte, "la financiación del 85% por parte del Banco de Desarrollo de China y el 15% restante por el Estado Nacional".
UNA SALIDA.
Por otra parte, al no haber acuerdo, Cristina acordó con su par chino, Hu Jintao, la puesta en marcha de una comisión bilateral con el fin de encontrar una salida a un litigio que puede afectar exportaciones argentinas por unos 2.000 millones de dólares y al resto de las diferencias existentes entre ambas naciones. La jefa de Estado, tras reunirse más de una hora con Jintao durante su visita oficial al país asiático, destacó que este es el "puntapié inicial" de una nueva relación entre los dos países, tras anunciar que pasado el jueves comenzará a funcionar la "comisión bilateral para el tratamiento de los temas de interés común", entre ellos los "comerciales y de inversión". Este conflicto no sólo se trata de un negocio de casi 2.000 millones de dólares, sino que el castigo se mide en pérdidas todos los días. Antes de esta represalia china a las trabas a sus manufacturas, el aceite de soja argentino cotizaba con una mínima diferencia de 5 dólares por tonelada en comparación con el brasileño, que se atribuía a la diferencia de flete. Ahora, la brecha se amplió a 30 dólares, seis veces más, ya que si bien India compra el aceite que antes se enviaba a China, lo paga más barato.
Luego de participar de la cena de honor ofrecida por el jefe de Estado chino y antes de partir a Shangai, en declaraciones formuladas a la prensa argentina, Cristina Kirchner aclaró que esa comisión no abordará una temática "en particular", sino que se evaluará "la totalidad de la relación inclusive para mejorar el valor agregado de la balanza de nuestras exportaciones". Cristina se disculpó por el suspendido viaje en enero por "asuntos internos" y Jintao la consideró como "una amiga" del país.
Fuente: El Dia
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