Maidana y Bopp, con buena leche

En el mismo rumbo, aunque con otras características, otros dos gremios también intentan sostener la actividad boxística. Por un lado, la pujante Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (ATILRA) y, por el otro, en menor volumen y con una reducida repercusión mediática, La Fraternidad (ferroviarios). ATILRA se mueve por estos días como el principal auspiciante del santafesino Marcos El Chino Maidana (campeón interino de los superligeros de la AMB) y de la bonaerense Yesica Tuti Bopp (campeona mundial minimosca de la AMB). Los colores amarillo y verde, distintivos de ATILRA, pintan la ropa de Maidana (27 nocauts en 28 combates, con una sóla derrota) y en la bella Bopp (1,55 metros, 48 kilos e invicta en 12 combates, cinco de ellos ganados por nocaut). La entidad que agrupa a los trabajadores lecheros se unió a Maidana y Bopp para respaldarlos económicamente y recibir, como devolución, la instalación del nombre “ATILRA” entre los aficionados y miles de espectadores que siguen sus combates por televisión. Ricardo Guardo, un promotor que aún es empleado ferroviario, consiguió en 2000, tras gestionarlo con la empresa Ferrobaires, un galpón en la estación Constitución que de a poco se fue convirtiendo en un gimnasio de boxeo. “Tiene un funcionamiento absolutamente democrático porque aquí entra quien quiere”, asegura Guardo, que agrega: “La idea original es sacar la mayor cantidad posible de chicos de la calle”. Los frutos deportivos de ambos boxeadores apoyados por La Fraternidad llegaron con rapidez. Pablo Sepúlveda se coronó campeón argentino gallo. Y Martín Finito Ahumada tuvo su noche de gloria el 11 de septiembre cuando le ganó a Martín Coggi quitándole el título sudamericano superligero.


Fuente : Clarin